Serigrafía de 6 colores sobre papel Somerset de 330 g/m² con pan de oro y plata. Esta obra está firmada y numerada a lápiz a mano por Sandra Chevrier, formando parte de una edición limitada de solo 50 ejemplares.
En La Cage, Bénédiction ou Malédiction, Sandra Chevrier nos confronta con una pregunta que parece flotar entre los destellos del pan de oro y plata: ¿es este rostro una bendición... o una maldición? Como en toda su serie La Cage, la artista canadiense entrelaza la piel real con el papel impreso, mezclando lo íntimo con lo icónico, lo delicado con lo heroico.
El rostro femenino, monumental y sereno, se ve interrumpido por fragmentos de cómic clásicos, donde superhéroes atrapados en sus propias narrativas nos hablan —más de lo que parece— del mundo fuera del papel. Pero aquí hay algo más: los toques de pan de oro y plata no solo elevan la pieza materialmente, sino simbólicamente. Brillan como una corona o una armadura, pero también pueden leerse como cicatrices preciosas, recuerdos dorados de batallas interiores.
¿La “jaula”? Sigue ahí, como siempre en la obra de Chevrier. Pero en esta edición especial parece relucir con una ambigüedad nueva, como si la artista nos susurrara que lo que encierra también puede proteger, y que lo que brilla no siempre redime.
La Cage, Bénédiction ou Malédiction no impone respuestas, sino que las deja suspendidas en el aire, envueltas en pan de oro, pan de plata… y una pregunta que resuena suave, como eco de un pensamiento antiguo.
